¿A que acojona?
Es tan bonito, que da miedo, mucho miedo, pero es que es precioso y las cosas son así.
Me he pasado la vida huyendo y las contadas ocasiones en las que le he plantado cara al miedo, he salido con un gran aprendizaje, pero muy mal parada.
"No huyas, ¿a dónde tienes que huir?"
Quieres darme un motivo lo suficientemente rotundo como para que me quede, quieres que vea que no tengo ningún sitio al que ir.
Que huir no es real porque nadie puede huir de si mismo.
Que la historia se volverá a repetir si no aprendo
Y ahí estás dándome el espacio para que sane y aprenda a no irme, sino a decidir.
Pero tú lo has dicho, acojona porque cada uno tiene un proceso, un tiempo y este no es el mío, no es mi tempo.
Créeme que por amor he forzado mil y una vez.
Créeme que he sentido que me moría y al día siguiente he cogido ese maldito tren.
Créeme que no me arrepiento, pero tampoco me importaría no haberlo hecho.
Créeme cuando te digo que tal vez la historia hubiera tenido otro final con un principio más a mi ritmo que al de los demás.
Dame tiempo, que yo quiero pasarlo contigo. Dame tiempo que yo solo necesito estar contigo.