Os pongo en contexto de una formación superior en la que los debates escasean y que hablar mal de la gente es pasatiempo nacional. Aquí surge una tertulia acerca del género, gracias a la asignatura de "Comunicación para la Igualdad", como veis, muy necesaria.
Por supuesto me refiero al género de 'masculino y femenino'. La sociedad en la que vivimos es:
-Cisgénero: Los órganos sexuales, es decir, el sexo de las personas y el género con el que se identifican coincide. Si tienes pene eres macho y si tienes vagina, hembra.
-Heteronormativa: Siendo cisgénero el hecho de ser hombre y tener pene significa que te atraen las mujeres y vaginas. Es decir, por norma, es una sociedad heterosexual.
Ser mujer con pene o hombre con vagina se deja entrever como un género roto, que no encaja ni coincide, al igual que aquellos transgénero que llevan a cabo una cirugía para el cambio de sexo. La teoría sobre la que se sustenta la convivencia social, no está preparada para entender estas posturas como otro tipos de género entre lo 'masculino y femenino'.
Ya que las personas no pueden etiquetarse y son demasiado complejas como para poder clasificarlas en únicamente dos categorías, el término QUEER recoge todas aquellas orientaciones y acciones performativas (actos prolongados en el tiempo) que se salen de la norma.
Esto no es un análisis en profundidad, pero he intentado plasmar los conceptos clave, que pueden tender un puente en un futuro cercano, entre la relación que hemos tenido los unos con los otros como sociedad hasta ahora y de aquí en adelante.
El amor es amor, lo mires por donde lo mires. Si hay violencia y dolor, no es amor. Si hay pruebas y órdenes, no es amor. Si hay medias verdades que ocultan la realidad por miedo, no es amor. El amor no tiene un sexo, género ni sexualidad definida ni definitiva.
El amor nace en una persona y desde ahí se extiende sin límites al mundo entero, todo depende de la persona.
BY: Kiissy
PD: Judith Butler y Simone de Beauvoir