jueves, 5 de diciembre de 2024

Qué buen momento

Qué buen momento para ser una pieza más de la partida y salir del tablero.

Qué buen momento para saltar, aunque sea demasiado hacia arriba.

Qué buen momento para soltar, por mucho que duela todo más en el vacío.

Qué buen momento para decir lo que pienso, por fin puedo hacerlo sin una guerra de por medio.

Qué buen momento para tener un punto y a parte en este mundo.

Qué buen momento para que nadie me reconozca.

Qué buen momento para volver a ser.

Qué buen momento para preguntarme quién quiero ser.

Siempre es un buen momento, pero este en especial... qué buen momento.


lunes, 25 de noviembre de 2024

Y de repente

todas las canciones de amor sonaban para mi, no para nosotros y me permití sentir una pieza de corazón que guardaba para los recuerdos. 

Qué cosas más extrañas pasan cuando duele el alma y es que cuando todo se viene abajo, el arriba no deja de existir por mucho que no lo veamos.

Qué duro gustarle a todo el mundo menos a ti mismo. Qué duro ver belleza en todo, tanto lo que tienes como lo que no. Qué duro es venir a este mundo a sentirlo todo y a ver los colores y a vivir la magia y a creer en el amor y en la vida y en lo que conviene. 

Qué duro creer en el amor romántico que se queda cuando tienes que darte cuenta que soltar es el mayor amor que pueden darte y que puedes dar.

Y cómo duele, qué bonita tiene que ser tu alma, qué fuerte, qué vulnerable, qué sutil, qué herida más grande te ha quedado para enseñarme a soltar para enseñarme que no es que no pase nada, siempre pasa todo y en ese todo hay amor, hay apego, hay dolor, hay libertad.

Qué duro ver todo por lo que he pasado sin amarme, qué duro ver todo lo que te he hecho pasar por no amarme, qué duro sentir que podría haber ahorrado tanto dolor si me hubiera querido antes, si hubiera comprendido antes que las reglas del juego nunca me las explicaron y yo lo entendí todo mal.

Nadie es más valiente por soltar o por quedarse, toda decisión supone de una fortaleza inimaginable, todo movimiento implica cambio y el quedarse es un cambio que transforma hacia dentro, que expande o comprime, que hace que llegar muy lejos, profundo y lento. Y cuando estás ahí, cuando te has roto para poder quedarte, cuando has confiado, cuando has intentado todo y aún así o todo o nada te convence, una parte de ti muere para siempre porque ha dejado de ser por si misma para ser parte de un todo consciente. Y no está mal, no pasa nada, pasa todo.

Soltar es la cruz de un duelo doble, soltar es llorar la pérdida antes de tomar la decisión, soltar supone heridas invisibles e injustificables en el exterior y una vez sueltas, sin arnés, sin cuerda, sin paracaídas, quien se cae eres tú y el mundo lo ve y tú solo te sientes libre a la vez que sabes, como el que se tira de lo alto de un tejado, que igual no era la mejor idea, pero es la única que pudiste tener. Y no está mal, no pasa nada, pasa todo.

Ojalá me hubieran dicho que no hay una decisión mala. Hubiera preferido saber antes que el imperativo categórico de Kant sobre la moral no era más que una opinión subjetiva con valoración de los hechos desde la conveniencia, porque sin moral y sin buenas o malas decisiones, 

sábado, 10 de agosto de 2024

Como en los 80

Pañuelo en la cabeza, como las chicas de antes, gafas enormes y unos labios perfectamente hidratados


"A la mierda" dijo girándose por última vez antes de entrar al coche en marcha.


Un buen Cadillac, un par de maletas atrás y la felicidad que puede llegar a tener un niño con juguetes nuevos, ella por fin se iba para siempre.


Marchaba por la carretera a 80, con estilo de los años 80, con música de los años 80 y se sentía tan rebelde como los de los 80 en un escenario.


La sonrisa no podía borrarse mientras sabía que tal y como se alejaba no dejaba nada atrás. 

Lo que estaba conquistando al marcharse era algo más grande que ella misma, además, le acompañaba una certeza liberadora de que lo que ganaba era infinitamente mayor de lo que perdía.

En ese momento de su vida era capaz de hacer una contemplación honesta de aquello en lo que se había convertido en los últimos años; todo el sufrimiento por el que había pasado le habían hecho tomar decisiones que se llevaban a cabo implacablemente sin el menor rastro de duda. 


Y cuantísimo le gustaba eso a ella. No dudar de lo que hacía y saber que se llevaba con ella la estabilidad y paz de quien es coherente consigo misma.


Una lección de años que tuvo que desaprender para volver a aprender y valorar de verdad.



miércoles, 31 de enero de 2024

Enseñar y aprender

Enseñar y aprender.

Nunca imaginé que irían tan de la mano, que serían tan recíprocos.
Cuando fui alumna nunca imaginé estar enseñando a mis profes.
Siendo profe, nunca me imaginé ser alumna de mis estudiantes.

Pero me sorprendo cada día, viendo mi reflejo en ellos, aprendiendo de su forma de hacer las cosas, de pensar, de sus malos días y de los mejores. Mis mayores maestros, han sido ellos.

Ser madre e hija a la vez, mamá siempre me ha dicho que he sido el regalo, orgullo y la lección más grande. Me ha dicho que ha aprendido lo que vale la pena de verdad.

Me pregunto si alguna vez yo seré hija, madre y algo más.

Me pregunto si ser pareja de alguien y compartir mi ser, me hará a su vez llegar a ser en toda mi plenitud individualmente.

Espero que sí, no lo querría de otra forma.

Porque para enseñar hay que aprender, para amar te tienes que querer, para ser con alguien, debes, primero, ser.

Tal vez descubra algo de esto pronto. Ojalá contarlo aquí, en este trocito de casi toda una vida que dejo a merced de quien me pueda encontrar.

A veces no es tan malo encontrar fuera las ganas de amarnos a nosotros mismos.
A veces no es tan malo romper en la enormidad de nuestro sentimiento si podemos reconstruirnos después más grandes, con más matices, con más recuerdo de vida.

A veces, solo a veces, que alguien te haga querer mejorar, solo significa que has encontrado tu hogar.

Qué buen momento

Qué buen momento para ser una pieza más de la partida y salir del tablero. Qué buen momento para saltar, aunque sea demasiado hacia arriba. ...