sábado, 6 de enero de 2018

Para Patri y Óscar

Esta es para Patri y para Óscar.

Eramos unos niños adorables los 3 y nos lo pasamos mejor que nadie juntos.

Lo siento, por todas esas veces que no os hemos cogido el teléfono, por esos encontronazos desagradables y tensos, por esas miradas perdidas, esa risa hipócrita, por esas miradas de pena.
Me dolió heriros. Lo hice. Lo sé. Lo siento. No había nada malo en vosotros y aunque en ese momento yo era la causante de lo negativo, no era culpable.

Echo de menos las tardes de verano tomando un helado. Las cabalgatas de los Reyes Magos. La primera vez que nos quedamos encerrados en el ascensor de casa de tu abuela.

También recuerdo con cariño como me soportabas, Óscar. te tenía una manía que no veas, me hacías rabiar tantísimo que no puedo creer todavía como nos lo pasábamos tan bien. En el cole me molestaban bastante y me recordabas un poco a ellos, a esas situaciones y yo no tenía ninguna capacidad para reaccionar o saber cómo responderte. Recuerdo saber que no me querías hacer sentir mal de verdad, que tenías y creo que sigues teniendo un corazón enorme y yo me frustraba muchísimo no saber qué hacer. Entonces tú cambiabas de actitud y me dejabas ganar a cualquier cosa, me hacías reír. No creo ni que te dieras cuenta, ¿cuántos años? creo que 6.

Por mucho que pasara sin vernos y por muy mayores que nos hiciéramos, siempre disfrutábamos como críos. Te echo de menos, creo que ahora tendríamos conversaciones cojonudas y encima tengo ganas de contarte que he aprendido a tocar la guitarra y que voy a escribir en un periódico, como tanto te gustaba leerlos... Había confianza y muchas ganas de estar juntos los tres.

Incluso juraría que él me propuso ser cantante en su grupo de rock. Me reí tanto que casi tiro medio helado. Canto de pena, pero me miraste muy en serio, muy directo y muy cercano. Lo rechacé lo mejor que pude roja como un tomate. Confianza.
Fuisteis mi primer pub, fuimos a las 6 de la tarde con 14 años. Juraría que Patri me dijo que también era su primero, pero chica, siempre he tenido mala memoria y recuerdo muy poco de nuestras conversaciones.

Lo que si sé es que siempre me defendías, nos apoyábamos y admirábamos mutuamente, sé que hubiéramos sido mejores amigas. También sé que en nuestro último encuentro paseamos por la playa, me contaste como iban las cosas en casa y por qué Óscar no había venido a pasar el verano contigo.

Recuerdo querer arreglar casi 10 años de golpe. Desear vivir lejos o que vosotros estuvierais un poquito más cerca.

Ojalá las cosas hubieran sido diferentes, mis circunstancias en ese momento, mi vida en general e incluso mi forma de actuar que al fin de cuentas es lo que importa. Ahora me sabe mal hablaros, me paro antes de interferir en vuestras vidas cuando estuve tanto tiempo dando a entender que yo no os quería en la mía. Hay cosas que se dicen tarde pero al final acaban saliendo.

Lo siento y gracias por los buenos momentos. Espero de corazón que hayan más helados y más risas y brindo por que nos volvamos a conocer pronto.

Dudo que esto lo leáis en vuestra vida, de hecho creo que esto no lo lee nadie, pero yo aquí lo dejo, junto con mis piezas periodísticas y mis intentos de novela, por si cuela.








No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja un comentario y haz más amena esta hora del té :) GRACIAS

Enseñar y aprender

Enseñar y aprender. Nunca imaginé que irían tan de la mano, que serían tan recíprocos. Cuando fui alumna nunca imaginé estar enseñando a mis...