-"He aguantado lo inaguantable"
-"Pues yo te veo bien".
Me miró serio y apenado-"Me merezco pasar página..."
-"¿Y yo merecía que me engañaras? Han habido tantas mentiras y tantas oportunidades..."
-"Sí, de ser lo que tú querías que yo fuera. No sabes lo que es pasarme cuatro años avergonzado de gran parte de lo que soy, solo porque tú no eres capaz de aceptarme".
Mi gesto hasta el momento impasible se crispó. Sabía que yo no era fácil de asumir, aunque sí de tratar.
Me sentía orgullosa de necesitar apenas unos poco mimos, una cena al mes y unas risas una vez por semana para estar feliz en una relación. No era una novia exigente que necesitara viajes o regalos constantes y mucho menos caros...
Pero el precio a pagar si querías estar conmigo era alto: nada de sexo, nada de pasar noches a solas, muchos celos, nada de conocer familias, cero alcohol y cero fiestas...
Sé que había podido tenerle tanto tiempo en ascuas gracias a la culpabilidad que él sentía tras haberme puesto los cuernos dos años atrás.
Ambos éramos conscientes de que ahora estaba "saldando su deuda", de alguna forma. Se había redimido prometiéndome y demostrándome que podía darme la luna durante más de un año.
Había sido un año de locos y sorprendentemente doloroso para mí también, no solo por él... Y era hora de acabarlo.
-Eres libre no te culpo.
-Gracias.- Hizo una pausa eterna y tuvo la osadía de rematar mi angustia con un seco "no dejaré que nada ni nadie manche el recuerdo de lo nuestro".
No hubo una mirada larga ni un beso de despedida. Me dio tiempo a decir un "yo tampoco" mientras pensaba en lo bien que se le había dado siempre hablar.
sábado, 18 de abril de 2020
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Conocernos y concedernos
Nos falta conocernos más a nosotros mismos, pero conocernos con todo. Conocer por qué nos alteramos es práctico, pero saber por qué recurri...
-
Qué hombre. Desde todos los ángulos y puntos de vista es excepcional. Él y sus películas. No se que hay en su mente, posiblemente nada del o...
-
Enseñar y aprender. Nunca imaginé que irían tan de la mano, que serían tan recíprocos. Cuando fui alumna nunca imaginé estar enseñando a mis...
-
Pañuelo en la cabeza, como las chicas de antes, gafas enormes y unos labios perfectamente hidratados "A la mierda" dijo girándose ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja un comentario y haz más amena esta hora del té :) GRACIAS