Lo gastan todo en ella, la gasolina, la paga, el tiempo y los besos. Usan su último aliento para que todo sea perfecto, para acomodarlo todo al gusto. Estos chicos se pierden a si mismos, al lanzar la última bala, para que funcione y no estar solos. Juran que si ese tiro sale mal, se acabaron los intentos y se irán a la mala vida, al mismísimo infierno o se perderán en la soledad.
Lo que no saben estos chicos es que siempre habrá una última bala más.
Interesante Metafora, me gustó mucho.
ResponderEliminarMuchas gracias por pasarte por mi blog, ya te sigo! Espero saber más sobre tu blog y así mantener el contacto.
Nos leemos bella!
Besos y buenas vibras :3
¡Wow!
ResponderEliminarEsta es la primera vez que entro a tu blog, y esta entrada ha sido fenomenal, ¿tu lo has escrito?
¡Lo he amado!
Definitivamente me quedo po aquí. Saludos :)
Hola. Me ha encantado, seguro que es tuyo. No lo se porque acabo de descubrir tu blog. Pero es increíble, me gusta mucho como escribes, el final me ha gustado mucho. Sigue así.
ResponderEliminarMuchos besos, nos leemos.
Muchas gracias a todas, el relato si que es mío!!!!!!!! Todo el contenido de este blog es CO y está registrada y protegida :3 Muchas gracias de corazón por leer, pasaros y comentar YA OS SIGO! En nada devuelvo comentarios <3
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