miércoles, 1 de enero de 2020

Japón

Aquí en 2020 es cuando he empezado a llorarte. 

Ya me conozco el proceso donde la puerta por donde se sale de tu vida cada vez es más grande, la voz más muda y todo, supuestamente, menos importante. 

Te necesito junto a mi para seguir creyendo en el amor. De qué te puedo culpar yo si solo soy un simple peón de una mente demasiado asustada. 

Lo que tengo es lo que soy y lo que quiero, en teoría, a dónde voy. 

Los problemas se hacen sumas y la resta somos tú y yo

Y con el estómago en un nudo te aviso de que el dicho de: "La vida son dos días" es una mentira. 

Yo llevo aquí ya unos cuantos días y joder, que lento va.


Nunca veremos juntos Japón.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja un comentario y haz más amena esta hora del té :) GRACIAS

Enseñar y aprender

Enseñar y aprender. Nunca imaginé que irían tan de la mano, que serían tan recíprocos. Cuando fui alumna nunca imaginé estar enseñando a mis...